- Los parásitos son directa o indirectamente la causa del 80 % de las enfermedades humanas.
- El sistema inmunológico humano resulta considerablemente afectado.
- La infección por parásitos puede provocar deficiencia vitamínica, agotamiento de los recursos minerales más importantes para el correcto funcionamiento del organismo humano (potasio, cobre, manganeso, selenio, zinc, magnesio y silicio) y problemas en el sistema hormonal.
- Los parásitos afectan al hígado, la vesícula biliar, el páncreas y el intestino.
- Los productos del ciclo vital de los microorganismos parasitarios provocan reacciones alérgicas, tales como urticaria, asma, dermatitis atópica, etc.
- Los parásitos producen cantidades elevadas de ácido láctico, aumentan el nivel colesterol “malo” (LDL) y otras sustancias perjudiciales para nuestro cuerpo.
- Los parásitos son muy peligrosos para los niños, ya que favorecen el desarrollo de anemia, alteran el desarrollo físico normal provocando retrasos en el crecimiento y deterioran la memoria.